¿Te has dado cuenta de que tu baja autoestima te somete a estar en permanente enfado contigo misma? Odias sentir miedo e inseguridad a lo largo de cada uno de tus días, y luchas por alejar estos sentimientos de ti. Pero están ahí, cuanto más te castigas por ser miedosa y desconfiada, peor te sientes contigo misma y más te cuesta mejorar la autoestima. ¿Qué puedes hacer para vencer este sentimiento de enfado contigo misma que está limitándote en la vida y que no te permite actuar con la seguridad que quisieras?: Reconciliarte contigo misma. Si aplicas la técnica que hoy te brindo, conseguirás reconciliarte contigo misma y podrás LIBERARTE para comenzar a actuar con más seguridad y confianza día tras día. Sigue los pasos al pie de la letra, te aseguro que funcionan y darás un paso muy importante por mejorar la autoestima. ¡Adelante!
La técnica con la que voy a obsequiarte, es uno de los métodos más efectivos para reconciliarte contigo misma y mejorar la autoestima. Es una de las técnicas más utilizadas por la doctora experta en autoestima “Carolynn Hillman”, y va a revelarte algo verdaderamente especial. Escucha esta historia de cómo le funcionó a Irene, una mujer que vino a visitarme hace una semana muy disgustada consigo misma:
Ella me decía: “Estoy harta de ser siempre miedosa e insegura en mi vida. Quiero reprimir y sacudir estos sentimientos porque no me dejan vivir como quiero; pero cuanto más me esfuerzo por eliminarlos, mas frustrada conmigo misma me encuentro, ¿qué puedo hacer?”
Yo le dije: “Irene, ¿sabes qué es realmente esa parte de ti que tanto odias?: Es la niña interior que todos llevamos dentro”.
“Dentro de ti hay una niña que tiene miedo, que está herida y asustada, y cuanto más pretendes alejarla de ti, más consigues que se sienta menospreciada y desolada. Cuanto más te enfadas con ella y más la culpas por ser insegura, indecisa y miedosa, más daño te estás haciendo a ti misma, porque querida, esa niña forma parte de ti. No puedes librarte de ella, te acompaña de por vida, así que no puedes enfadarte con ella. Necesitas ATENDERLA, COMPRENDERLA Y AYUDARLA para lograr seguir adelante. Si la desprecias, estás empeorándolo todo sometiéndote a una lucha permanente contigo misma y nunca avanzas en mejorar la autoestima”.
Noté a Irene impactada por esta revelación. Al fin comprendió que su parte miedosa e insegura, no es más que una niñita que habita en su interior que se siente sola, atemorizada y que necesita de su comprensión y ayuda. De una vez por todas Irene ha comprendido quela ÚNICA forma en la que va a dejar de tener miedo y va a lograr ser más confiada y segura de sí misma, es ayudando a su niña interior a vencer su dolor, que en realidad, es el propio dolor enterrado de Irene.
Irene aplicó esta técnica junto conmigo y pudo experimentar el maravilloso cambio del odio a la aceptación y al amor por su niña interior. Así que sigue los siguientes pasos al pie de la letra y lograrás abrir tu corazón a tu niña interior. ¿Puedes imaginarte tener en manos el poder de ser una madre de ti misma que sepa reconfortarte de por vida? Sigue el ejercicio, vas a lograrlo:
(Muy importante: El ejercicio se realiza con los ojos cerrados, así que graba los pasos para que puedas seguirlos con los ojos cerrados, o memorízalos)
- Cierra los ojos y respira lenta y profundamente tres veces notando a cada exhalación como te liberas de todas tus tensiones y te relajas cada vez más y más.
- Ahora que ya estás relajada y tranquila,imagínate a tu niña interior acurrucada en tu regazo, o quizás en tus brazos. Deja que la imagen llegue poco a poco, no la fuerces y tranquilamente espera hasta que la escena llegue a tu imaginación. Estás acurrucando a tu niña interior entre tus brazos.
- Obsérvate junto con tu niña interior, mírala con amor: ella es la niña que siempre te ha acompañado en la vida. Disfruta de estarla acurrucando y amando, deléitate en el amor que estás dando a tu niña interior. Y date cuenta de que siempre puedes disponer de este amor hacia tu niña con tan sólo estar con ella en tu imaginación, amándola. Dándola el calor que necesita.
- Ahora que estás en contacto con tu niña, experimenta su inocencia. Visualiza a esa niña que fuiste al llegar al mundo, que tenía ganas de crecer y florecer, que estaba ansiosa de contemplar el mundo y era aún ignorante de lo que vendría después. Deja que tu corazón se sumerja en esa niña inocente y esperanzada que fuiste. Esa niña que era al mismo tiempo fuerte y vulnerable. Adorable y afectiva. Dale el amor que tú sabes que necesita. Acurrúcala, ámala. Esa niña está aún dentro de ti y necesita tu amor con desesperación.
- Por último, abraza a tu niña y dile que siempre estarás ahí para amarla, guiarla y ayudarla. Díselo mientras la abrazas: “Siempre estaré aquí para amarte, guiarte y ayudarte”. Y observa a tu niña interior recibiendo el amor que le estás dando, cómo se siente gracias a tu protección. Siente lo mismo que siente tu niña interior cuando recibe el amor y la protección que le estás prometiendo. Quédate en esto un tiempo, dando y recibiendo el amor hacia tu niña interior. Cuando estés lista, vuelve al presente.
Increíble la experiencia, ¿verdad? Irene hace este ejercicio al menos una vez al día ydisfruta enormemente de la sensación de ofrecerse y recibir amor. Si lo haces varias veces, notarás como cada vez te es más fácil imaginarte queriendo y apoyando a esa niña interior que no es más que la parte de ti misma más débil y desprotegida. Cada vez que lo hagas te estarás FORTALECIENDO. Si te acostumbras a practicarlo, poco a poco vas a dejar de ser la misma. Vas a lograr ayudarte y comprenderte con cariño; vas a dejar de odiarte y te vas a sentir una mujer más fuerte. ¿Maravilloso, no es cierto?
Puede que no estés acostumbrada a este tipo de ejercicios, que te resulten extraños o absurdos, y que por eso decidas pasar de largo este artículo y no aplicar la técnica. Déjame decirte algo: Si crees que no tiene sentido intentarlo, haz el favor de detenerte y darte un incentivo para hacer el ejercicio. Lo único que no puedo hacer por ti es hacerlo yo, así que necesitas tener CONFIANZA y hacer de una vez por todas algo diferente para cambiar tu situación. Si piensas: “no me va a funcionar”, es propio de tu baja autoestima. ¿Es posible que tengas enfrente de ti una solución comprobada y no intentes nada por mejorar la autoestima? Si abandonas tus deseos de intentar de una vez por todas algo diferente por mejorar, ¿qué te queda entonces?
Me gustaría que me dejaras tu comentario sobre cómo te fue con este ejercicio, qué dificultades y problemas tienes para mejorar la autoestima. Voy a contestarte personalmente a todos tus comentarios con el deseo de hacer todo lo posible por ayudarte a mejorar la autoestima.
Gracias,
Cristóbal Tobal.
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