Hace más de 15 años trabajé como tripulante de cabina (sobrecargo/azafata) para una aerolínea durante un verano y tuve una relación de pocos meses con un compañero de trabajo muy cordial, divertido y atento. Las cosas no prosperaron y nos separamos en excelentes términos. No supe nada de él hasta que…
Hace poco tiempo nos volvimos a encontrar en una reunión de ex compañeros de la aerolínea. Estuvimos hablando bastante tiempo y la verdad es que pude reconocer a la persona con la que había compartido el trabajo y un romance. Le ha ido bien en su vida, lo que me puso contenta. Uno de los ex auxiliares de a bordo presentes (Carlos) nos invitó a su fiesta de cumpleaños que se celebraría a las pocas semanas.
Algunos días después, el cumpleañero me pidió hablar en persona, ya que tenía algo importante para contarme. Tenía que ser sí o sí antes de la fiesta. No tuve inconveniente alguno en juntarnos, estaba bastante intrigada de saber qué pasaba.
Carlos no sabía cómo empezar a hablar. Se lo veía nervioso, dijo que temía que lo que me iba a decir me cayera mal. Daba vueltas y vueltas, llenas de palabras y sin conceptos, hasta que le pedí que fuera al grano y me dijera claramente qué estaba pasando.
Ahí me explicó que mi ex, actualmente, es gay (Carlos se enteró enseguida después de la reunión) y que iría a su cumpleaños con su pareja actual, el hombre con el que convive desde hace más de un año.
La noticia obviamente me sorprendió y me dejó pensativa. Había escuchado de gente a la que le había pasado algo similar y la verdad es que, en un principio, me resultó extraño, ya que nada en su proceder de hace tantos años me dio indicio alguno de que le gustaban los hombres. De hecho, en el trabajo tenía bastante éxito con las mujeres –había un par interesadas en él- y eso le agradaba. Esto respondió a la pregunta de Carlos que lógicamente siguió a la revelación: ¿nunca sospechaste nada? No, en absoluto.
La fiesta de cumpleaños fue amena y divertida: mi ex con su hombre y yo con el mío. Me dieron ganas de hacerle un par de preguntas (si ya se había dado cuenta cuando estaba conmigo, por ejemplo, o por qué no me había comentado nada en su momento), pero entendí que lo mejor es dejar el pasado tal como está y mirar hacia adelante, como siempre sugiero.
A mí me parece excelente que cada persona tome las decisiones que considera más atinadas para su vida en el momento que pueda, se den las circunstancias o lo decida. El resto son solo detalles.
¿Has tenido noticias un tanto atípicas de alguna ex pareja?
Fuente: http://www.mejoraemocional.com
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